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Mensaje  Termii.- Sáb Mar 15, 2008 9:58 pm

Nota: el post va a ser largo, pero para aquella persona apacionada por la NBA, les encantará.

Bien, el básquetbol no está tan enamorado de sus récords como otros deportes -- expresamente, el béisbol.
De modo que se está escapando del radar el hecho de que varios jugadores activos tienen la oportunidad de romper algunas marcas de la liga en estadísticas totales. Eso es porque muchos se hicieron profesionales directamente después de la preparatoria, o al cabo de un solo año en la universidad. Kevin Garnett, Kobe Bryant, Dirk Nowitzki, Allen Iverson, Carmelo Anthony, LeBron James y otros podrían llegar a batir viejos récords de carrera.
Así que empezamos a preguntarnos, ¿lo lograrán?
Para medir las probabilidades de que un jugador rompa un récord, probé un sistema métrico basado en la edad, la altura y el nivel de desempeño. Éste método se fundamenta liberalmente en la fórmula "Juguete favorito" desarrollada por Bill James para el béisbol hace un par de décadas. Yo tampoco sé por qué la llamó "Juguete favorito", pero para el béisbol la cosa funciona.
Para el básquetbol, requiere algunas modificaciones. Para empezar, debemos tener en cuenta que en la NBA las carreras son algo más cortas que en el béisbol. En segundo lugar, debemos tener en cuenta que la altura es un factor importante a la hora de predecir la longitud de una carrera, ya que cualquier clase de desviación de la altura óptima, 6'10 pies, reduce el posible número de juegos en la carrera de un jugador.
Tras experimentar un poco, desarrollé una nueva versión del "Juguete Favorito" para el básquetbol.
El primer paso fue descubrir por cuánto tiempo más un determinado jugador puede mantener, en promedio, su nivel actual.

La ecuación es la siguiente:

Temporadas restantes = (42-Edad)/2.2

"Edad", en este caso, es la edad del jugador medida en años a partir del 31 de diciembre del 2008. De modo que un jugador de 22 años tendría 9.1 temporadas por delante; un jugador de 28, 6.4; y uno de 36, 2.7.

Debería aclarar que estas estimaciones son muy optimistas para la mayoría de los jugadores de la NBA, pero en este proyecto no estamos apuntando a la "mayoría", sino a las estrellas, quienes suelen tener las carreras más largas.

Nota: Esto no es una predicción de cuándo un jugador va a retirarse, sino un modo de estimar el número de temporadas futuras que podemos acreditarle a un jugador en la siguiente fórmula.

Como segundo paso, incluí la altura en esta ecuación:

Temporadas restantes ajustadas = temporadas restantes * (60-Diferencial de Altura)/55)

"Temporadas restantes" es el resultado de la primera ecuación y "Diferencial de Altura" es la diferencia, en pulgadas, de la altura óptima (6'10 pies).

Como tercer y último paso, necesitamos determinar el "nivel establecido" de un jugador en cada categoría estadística. Eso es lo más fácil, porque la fórmula de Bill James se ajusta perfectamente al básquetbol en este aspecto.

Para descubrir el "nivel establecido" de un jugador, usamos los datos de las últimas tres temporadas, dándole mayor énfasis a la campaña en curso.

# Toma una parte del los resultados de un jugador de hace dos años;
# toma dos partes de sus resultados de la temporada pasada;
# toma tres partes de sus resultados prorrateados de esta temporada;
# suma todo;
# divide el resultado por seis.

Nota: El "Juguete Favorito" se emplea idealmente entre temporadas. En este caso, estamos usando los datos de esta campaña porque la temporada regular está un 80 por ciento completa.

Por ejemplo, Nowitzki viene en ritmo para jugar 3,011 minutos esta campaña. La pasada jugó 2,821 minutos, y la anterior, 3,089. Su "nivel establecido" serían 2,960.7 minutos.

Con esa cifra, podemos calcular las probabilidades que tiene un jugador de batir un récord, usando nuevamente el sistema métrico de James.

Probabilidades de récord = [(temporadas restantes * nivel establecido)/ cantidad necesaria] - 0.5

En el caso de Dirk, tiene una proyección de 5.75 temporadas restantes, y un nivel establecido de 2,960.7 minutos, para un total de 17,024 minutos. Necesita jugar 29,560 minutos después de esta campaña para batir el récord de Kareem Abdul-Jabbar, de 57,447 minutos, así que eso va en el denominador. Divide y réstale 0.5, y verás que Nowitzki tiene un 7.6 por ciento de probabilidades de batir el récord de minutos jugados.

Resulta que Dirk no es el único que tiene una oportunidad de romper esta marca. Varios de sus colegas tuvieron mejores resultados, encabezados por Kobe Bryant con un 18.0 por ciento, LeBron James (15.3 por ciento) y Kevin Garnett (14.3 por ciento).

Pero existen peces más gordos que el récord de minutos. Echemos un vistazo a las otras marcas que podrían ser derrocadas en los próximos años.

Pero antes, quiero hacer otra aclaración: Esta fórmula trabaja en extremos -- puedes terminar con un porcentaje superior a 100 o inferior a 0. Para lo que estamos haciendo, está bien. La idea es tener una idea de las probabilidades que tienen los jugadores que se han perfilado hacia un determinado récord. No sirve para calcular las probabilidades de que alguien sea arrollado por un autobús el día antes de batir un récord, o de que alguien de pronto dispare su talento y se convierta en un jugador mucho mejor.

Con eso en claro, pasemos a la parte divertida.

El récord más vulnerable

El récord de carrera con mayores probabilidades de ser quebrado en los próximos 15 años es el de triples, que actualmente está en manos de Reggie Miller, con 2,560.

Ray Allen le roza los talones con 2,071 y el método estima que tiene una chance del 97 por ciento. Y eso que estamos respetando la regla de Bill James según la cual ninguna probabilidad puede superar el 97 por ciento. Lo que el método está diciendo, en este caso, es que Allen romperá el record si no se lesiona. El índice establecido de Allen es de 198 por temporada, así que aunque se enfríe un poco con la edad, se adueñaría de esta marca en algún punto de la campaña 2010-11.

En caso de que Allen no consiga quebrar, hay muchos jóvenes en lista de espera. Rashard Lewis tiene una chance del 37.6 por ciento, mientras que Jason Richardson y Ben Gordon lo siguen con probabilidades de 29.1 y 24.6 por ciento, respectivamente. Dichas probabilidades bajarán, obviamente, cuando Allen haya subido la barra.


Sr. Havlicek, tenemos buenas noticias

Hay otra marca que tiene más del 50 por ciento de probabilidades de caer en los próximos años: El récord de tiros de campo fallidos de John Havlicek: 13,417.

La marca de Havlicek corre peligro de ser arrasada por Allen Iverson y Kobe Bryant. Las probabilidades de Bryant son del 69.5 por ciento, pero Iverson seguramente será el primero en alcanzarlo, con una chance del 71.3 por ciento. Es bastante posible que dentro de media década Hondo quede tercero en la lista.

Y tal vez siga bajando -- dentro de la siguiente generación, tanto LeBron James (33.5 por ciento) como Carmelo Anthony (20.7 por ciento) están perfilados hacia este récord.


El gran mago

Uno de los récords más vulnerables, también es uno de los más preciados: el récord de anotaciones de Kareem. A los 30 años, Kobe Bryant cubrió tres quintas partes del camino en totales brutos, y según mi método tiene un 30.7 por ciento de probabilidades de adueñarse de esta marca.

Sólo otros dos jugadores aparecen en el radar para este récord. Uno, claro, es James, con un 21.1 por ciento de probabilidades. El otro podría sorprenderte: Carmelo Anthony. Nadie lo considera como uno de los grandes de todos los tiempos, pero según la fórmula tiene un 7.6 por ciento de probabilidades de convertirse en el gran anotador de la historia de la NBA si es que Kobe y LeBron no llegan.


Otras marcas vulnerables

Es posible que Bryant termine intentando más tiros que cualquier otro jugador en la historia de la NBA. Tiene un 33.1 por ciento de probabilidades de alcanzar el récord de intentos de tiros de campo, marca que actualmente pertenece a Abdul-Jabbar.

James (22.4 por ciento), Anthony (10.9 por ciento) y Iverson (10.1 por ciento) también tienen buenas chances.

Sin embargo, la marca de Kareem en intentos acertados parece ser mucho más difícil de alcanzar. James es quien más se le acerca, con un 8.4 por ciento de probabilidades de alcanzarlo, seguido por Bryant, con 4.4 por ciento. No hay nadie más en el radar.

En la línea de tiros libres, hay dos jugadores activos que prácticamente tienen las mismas chances de derrocar el récord de intentos de Karl Malone. A pesar de ser el cuarto de todos los tiempos, Shaquille O'Neal no es uno de ellos. Su ex compañero Kobe Bryant tiene un 15.2 por ciento de probabilidades de romper la marca, mientras que la mejor chance le pertenece a King James, con un 17.5 por ciento.

Las probabilidades de Bryant mejoran en tiros libres acertados. Aquí sus perspectivas de batir la mejor marca son del 37.2 por ciento, muy por encima de James (14.4 por ciento), Iverson (9.5 por ciento) o Chris Bosh (4.5 por ciento).

Y luego existe el récord de presentismo. Por haber llegado a la NBA a temprana edad, Bryant (9.6 por ciento), Nowitzki (4.6 por ciento) y James (4.0 por ciento) tienen pequeñas chances de batir el record de Robert Parish, de 1,611 partidos jugados.


Los récords más inalcanzables

Si estás pensando en batir el récord de asistencias totales de John Stockton, olvídalo. Ni siquiera los cuatro jugadores que promedian más de 10 asistencias por partido esta temporada tienen una chance. De hecho, para poner la marca de 15,806 de Stockton en perspectiva, piensa que el dos veces JMV Steve Nash ha promediado más dos dígitos en asistencias en cada una de las últimas cuatro temporadas... y si lo hace dos veces más, habrá cubierto apenas la mitad del récord de Stockton.
Otra marca que se encuentra segura son los rebotes totales de Wilt Chamberlain. Solamente un jugador activo, Dikembe Mutombo, ha cubierto la mitad del camino. Tal vez la "mejor" chance le pertenezca a Kevin Garnett; para superar a Wilt, KG sólo tendría que encabezar la liga en rebotes hasta los 45 años de edad.

Tercero en la lista de inalcanzables se encuentra el récord de Moses Malone en rebotes ofensivos totales, que, siendo de 6,731, supera en más de 2,000 rebotes a cualquier otra marca en la historia. Ningún jugador activo, ni siquiera Dwight Howard, tiene una chance. Y si sumas los 651 rebotes ofensivos de Moses en la ABA, el récord se torna aún más inalcanzable.

Nota: Los rebotes ofensivos no se computaron oficialmente hasta 1973-74.

Y luego está el récord de Oscar Robertson de 181 triples-dobles. Jason Kidd es el único jugador activo que está a mitad camino, con 99, y según la fórmula ni siquiera él tiene chances. Lo mismo va para James; de hecho, puedes contemplar la magnitud del logro de Robertson sabiendo que James sólo tiene 17 triples-dobles en cinco temporadas como profesional.


Un par que tal vez no te esperabas

Mientras que la marca de Moses Malone en tablas ofensivas (6,731) parece estar segura, el récord de Abdul-Jabbar en rebotes defensivos (14,465) está mucho más en juego. (Nota: Los rebotes defensivos no se computaron oficialmente hasta 1973-74.) Eso es sorprendente considerando cómo ha bajado el ritmo de la liga desde aquellos días, y la cantidad de años que jugó. Pero con un desempeño dominante en las tablas defensivas y un debut prematuro en la liga, Howard tiene un 14.9 por ciento de probabilidades de adueñarse de esta marca. Otro candidato menos factible es Garnett, con un 3.5 por ciento. Estaba mejor parado antes de esta campaña, pero sus marcas bajaron.

Dikembe Mutombo es el segundo de todos los tiempos en tiros bloqueados, pero no tiene chances de alcanzar a otro Rocket, Hakeem Olajuwon, quien marcó 3,830 bloqueos. Sin embargo, hay otro jugador que tiene una buena chance. Josh Smith de Atlanta tiene apenas 22 años pero ya cubrió un quinto del total de Olajuwon. Según mi método, tiene un 17.8 por ciento de probabilidades de quebrar esta marca. Es el único jugador por encima de cero.

Nota: Los bloqueos no se computaron oficialmente hasta 1973-74.

En líneas similares, el récord de robos de Stockton (3,265) es algo más vulnerable que su marca de asistencias -- pero no por mucho. Stockton terminó con 700 robos más que cualquier otro jugador en la historia, dejando a Chris Paul con una fina, pero muy fina posibilidad --0.1 por ciento-- de adueñarse de esta marca. Estamos hablando de una chance de uno en 1,000. Como Smith en los bloqueos, es el único jugador activo por encima de cero.

Sin embargo, Baron Davis tiene una oportunidad si se mantiene sano. Por el momento, arroja cero probabilidades ya que tuvo una campaña 2005-06 repleta de lesiones, pero si se mantiene sano en lo que resta de esta temporada y la próxima, y sigue robando balones como lo está haciendo, tendría un 2.1 por ciento de probabilidades.

Nota: Los robos no se computaron oficialmente hasta 1973-74.


¿Alguien quiere estos viejos récords?

Además de la marca de Havlicek, hay unos cuantos otros récords que seguramente nadie quiere batir.

Tenemos varios jugadores que se están acercando al récord de Abdul-Jabbar en faltas personales (4,657). Shaq tiene una pequeña chance de alcanzarlo, 1.5 por ciento, pero las probabilidades siguiente generación son mayores. Howard está en 17.2 por ciento y Amare Stoudemire --a pesar de haberse salteado la campaña 2005-06-- está en 8.7 por ciento. De hecho, con otra temporada completa a este ritmo, las probabilidades de Stoudemire se dispararán al 22.3 por ciento.

En contraste, el récord de Wilt Chamberlain en tiros en falta fallidos (5,805) parece estar relativamente seguro. Shaq está en segundo lugar, pero sólo tiene una chance del 3.5 por ciento del alcanzar a Wilt en el podio. El jugador con mejores probabilidades es Howard, con un 12.3 por ciento, pero si su descarga mejora bajarán notablemente.

Kidd tiene un 11.8 por ciento de probabilidades de romper la marca de balones perdidos totales, que actualmente está en manos de Karl Malone (4,524). (Un comentario al margen: Si Malone tiene el récord de pérdidas y Stockton el récord de robos, ¿cuánto aumentarían sus marcas si hubieran podido jugar en contra?)

Pero si Kidd rompe el récord, tal vez no lo conserve por mucho tiempo. Iverson viene ganando terreno y tiene un 15.9 por ciento de probabilidades de adueñarse de la marca de Malone. Y detrás de ellos viene Bryant, con un 25 por ciento de probabilidades de sobrepasar al plusmarquista.

Aunque los tres fallen, el récord podría ser derrocado de todas maneras. Entre los más jóvenes, Anthony (13.1 por ciento) y Howard (21.7 por ciento) también son candidatos. No hay ningún otro record con tantos aspirantes.
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Mensaje  amparitooo! Dom Mar 16, 2008 1:54 am

Excelente información.
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Mensaje  Termii.- Dom Mar 16, 2008 2:33 am

la verdad que si. Espero que esto lo sepan los jugadores asi se motivan a romper estas rachas.

Dejo otros Records, del hombre maravilla:

Documento extraido de
Terra

La creación nunca antes fue más bondadosa con un deportista como cuando tocó con su mano a Wilt Chamberlain.

Sólo de un molde divino se podría sacar la explosiva combinación de un basquetbolista que reunía a la perfección anotaciones y rebotes. Su versatilidad a la hora de atacar el aro, y la personalidad que imponía a la hora de defender la canasta hacían de Chamberlain un jugador fuera de serie. Era tanta su ventaja sobre los rivales que orilló a la NBA a cambiar en 1964 la regla de la línea ancha bajo la canasta al ampliarla de 12 a 16 pies.

Estrella de pista y campo en la Universidad de Kansas, Chamberlain medía 2.16 metros de estatura y pesaba 125 kilos, pero agregó más masa muscular a medida que su carrera progresaba, llegando a pesar 136 kilos de pura fibra.

En 1955, la NBA creó un draft territorial que permitía a un equipo reclamar a un jugador de una universidad local. Gottlieb, uno de los fundadores de la NBA, argumentó que Chamberlain había crecido en Filadelfia y como no había equipos de basquetbol de la NBA en Kansas, los Guerreros ejercieron sus derechos territoriales, siendo la única ocasión en que un jugador fue una selección territorial por sus raíces preuniversitarias. Después de jugar un año con los Harlem Globetrotters, Chamberlain se enfundó el uniforme de Filadelfia en la campaña 1959-60. El mundo del basquetbol esperaba ansiosamente su debut y no decepcionó, en su primer combate, contra los Knicks de Nueva York, Chamberlain anotó 43 puntos y recuperó 28 rebotes.

En un sensacional primer año, Chamberlain promedió 37,6 puntos y 27 rebotes por partido y fue nombrado Novato del Año de la NBA, Mejor Jugador del Juego de Estrellas y Mejor Jugador de la NBA, además de ser incluido en el equipo ideal. Aunque la temporada inaugural de Chamberlain tuvo un alto precio. Después de llevar a los Guerreros a la postemporada saltando del último al segundo lugar y, luego de caer en la serie de playoffs 4-2 ante los Celtics de Boston, el novato asustó a sus aficionados al anunciar que pensaba retirarse debido a la rudeza excesiva de sus oponentes.

Chamberlain sabía cómo controlar su cuerpo y sus emociones, así lo prueba su sorprendente récord de una sola expulsión por acumulación de faltas en más de 1200 juegos en 14 años de carrera. Desde luego, Chamberlain no se retiró, aprendió a soportar el castigo y a contrarrestarlo. Dominaba el juego como pocos jugadores en la historia de cualquier deporte y sus cifras lo avalan.

Los libros de récords están llenos de logros de Chamberlain; es el único jugador de la NBA en anotar 4000 puntos en una temporada. El 2 de marzo de 1962 quedó registrado como la fecha en que anotó 100 puntos en un juego, además conserva la marca de más tiros de media distancia encestados de forma consecutiva, con 18, y más rebotes, con 55.

Quizá su estadística más sorprendente sea su promedio de 50,4 puntos por juego en la 61-62, y si no es ese, entonces posiblemente sean los 48,5 minutos jugados por partido que promedió esa misma campaña. Es el segundo de todos los tiempos, sólo detrás de Kareem Abdul-Jabbar, en puntos conseguidos con 31.419, y es el líder en rebotes con 23.924.

Encabezó a la NBA en puntos anotados 7 años consecutivos, fue el líder reboteador de la liga en 11 de sus 14 temporadas, y por si acaso tuviera que probar que no fue un jugador egoísta, Chamberlain logró el mayor número de asistencias de la NBA en el torneo 67-68. En 1962, Chamberlain se cambió junto con la franquicia, a San Francisco, pero a mitad del siguiente torneo fue enviado de regreso a Filadelfia con los 76's, canjeado por tres jugadores, consiguiendo después con este equipo el título de la NBA.

Después de la temporada 1967-68, Chamberlain fue traspasado a los Lakers de Los Angeles a cambio de tres jugadores, ahí pasó sus últimas cinco temporadas ayudando a los Lakers a llegar a la Serie Final de la NBA en cuatro ocasiones, ganándola en 1972 y retirándose al final de la temporada 1972-73.

En 1978, en su primer año de elegibilidad, Chamberlain fue seleccionado al Salón de la Fama Naismith Memorial de Basquetbol y en 1996-97 fue seleccionado para el equipo ideal de todos los tiempos de la NBA en el 50 aniversario de la liga.

Con todos estos logros nadie puede negar que la NBA tuvo un ser superior que se codeó con los mortales.


Comparativo de los logros conseguidos por dos de los mejores jugadores en la historia del basquétbol

Novato del año:
Chamberlain: 1960 (1960-1974)
Jordan: 1984 (1984-1998, sin contar su paso por Was)

Temporadas NBA:
Cha: 14
MJ: 13

Puntos totales:
Cha: 31.419
MJ: 29.277

Rebotes:
Cha: 23.924
MJ: 5.836

Max. puntaje:
Cha: 100
MJ: 69

Max. anotador:
Cha: 7 veces
MJ: 10 veces

Prom. mas alto de pts.:
Cha: 50.4
MJ: 37.1

Anillos:
Cha: 2
MJ: 6

MVP:
Cha: 4 veces
MJ: 4 veces

MVP del juego de las estrellas:
Cha: 1 veces
MJ: 2 veces

MVP de la Final:
Cha: 1 vez
MJ: 6 veces

Defensivo del año*:
Cha: 1
MJ: 5

Medallas Olimpicas**:
Cha: 0
MJ: 2

*Este trofeo nace en 1983
** Los profesionales no asistían a las Olimpiadas hasta 1992
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